El francés empieza las clases de castellano para que su integración sea «lo más rápida posible».
PASCUAL CALABUIG - Jérémy Mathieu tiene una misión que cumplir, triunfar en el Valencia. Para alcanzarla el francés sabe que es «necesario» aprender castellano y, por ello, ha comenzado las clases sin más tiempo que perder. SUPER fue testigo de su primer encuentro con los libros y, observando lo atento que escucha la lección, parece que los progresos llegarán pronto. Mientras tanto, el ex del Toulouse promete «hablar sobre el campo» y ayudar así al equipo en el primer tramo de la temporada que se avecina. El lateral izquierdo está contento con el rendimiento que está ofreciendo, pero desea dar «mucho más».
Actualmente, el principal obstáculo que se le presenta a diario es el lenguaje. Sin embargo, ya se ha puesto remedio. «Estoy adaptándome, pero muy contento porque este es un gran club. Sinceramente, no hablo demasiado porque no conozco todavía el español, aunque estoy seguro de que con el transcurso del tiempo hablaré bien y entraré más en contacto con todos. Por ahora, hablaré sobre el terreno de juego», explica.
Mathieu confiesa que le encantaría poder dialogar «más» con los compañeros, participar en las bromas y el «buen ambiente» que reina en el vestuario. «No saber hablar lo hace un poco difícil porque me gustaría dialogar un poco más con los compañeros para que así me vayan conociendo. A veces los veo reír, pasarlo bien, pero no comprendo lo que dicen. Es lógico, más adelante será diferente», dice un Jérémy que considera que el cambio de aires que ha experimentado puede ser, sin duda, una experiencia definitiva para a sus 25 años madurar totalmente como jugador. «Aparte de porque pienso que el Valencia es uno de los mejores clubes, ése fue un motivo importante por el que decidí jugar en el extranjero, no seguir en Francia, y elegir el VCF. Ahora lo que quiero es adaptarme lo más rápido posible y por eso vamos a empezar con este curso de español».
Una de las razones por las que la integración es costosa es porque entre sus compañeros el francés no brilla en demasía. Son pocos los que pueden mantener un diálogo con él. Preguntado por si hay alguien en el equipo que hable bien la lengua gala, responde: «No (risas). Está Nacho González que jugó en Mónaco seis meses y habla un poco. Después Carcedo, el segundo entrenador habla algo. Marchena, también…». En la concentración de Ermelo su compañero de habitación fue Bruno, allí los dos no pudieron entenderse demasiado. «Un poco con gestos», reconoce. Eso sí, puntualiza y agradece el esfuerzo de todos por integrarlo en el grupo: «He de reconocer que todo el mundo intenta ayudar e integrarme».
Jérémy ha venido de Francia con algunas nociones básicas de castellano, conceptos que ampliará y pulirá gracias a los profesores que, a través de la Fundació VCF y la Universitat de València, le ha facilitado el club. «Recordaba algo del colegio, pero nada más. Antes de venir repasé lo más básico. Lo más esencial y típico. Hola, ¿cómo estas?, ¿cómo te llamas?, Buenos días…», bromea. Carcedo, traductor de Emery«La verdad es que comprendo mejor que hablo. Además, el segundo entrenador también me traduce los ejercicios para poder trabajar como todos». Como cuenta el zurdo, es Juan Carlos Carcedo, quien jugó en el Niza, el encargado de acercarse a él en entrenos y partidos para traducirle, o simplemente, darle las instrucciones técnicas. ¿Cuáles son esas palabras clavé, necesarias para un lateral que no domina el idioma? «Subir, bajar, derecha, izquierda, cuidado, balón...», enumera el jugador.
Regresando al fútbol, las sensaciones dejadas en los primeros partidos, sobre todo en Old Trafford, tienen muy satisfecho al de la Alta Sajonia. «Me sentí muy bien, bastante cómodo, en esa primera parte contra el Manchester. Pude subir un poco más la banda que en otros partidos. Es fantástico jugar frente a rivales como el United o el Arsenal para que cada uno pruebe su estado de forma y también ver qué podemos dar como equipo», argumenta un jugador que, no obstante, promete «hacerlo mejor», atreverse aún más, conforme aumente la adaptación al juego del equipo y alcance el tono físico adecuado. «Aún necesito mejorar en aspectos del funcionamiento defensivo del equipo, ofrecer lo que quieren los técnicos de un lateral. Entonces podré mostrarme más a nivel ofensivo, a mí me gusta subir la banda, centrar, disparar, participar en ataque. No hemos visto al mejor Mathieu, puedo dar mucho más, esto sólo ha empezado. Físicamente necesito ir a más, coger la forma en esta pretemporada», indica el pelirrojo de 1,91 m.
Para finalizar tuvo palabras de agradecimiento para Guy Lacombe, el míster que lo descubrió y quien señaló en este diario que, «si Mathieu se lo cree, será imparable». «Tiene razón, los resultados son mejores si uno tiene fe en él. He progresado y me siento mejor futbolista que hace unos años. Guy es muy importante, lanzó mi carrera en Ligue 1. Tiene carácter, es un apasionado, lo aprecio porque me hizo cumplir mi sueño de jugar al fútbol profesional», acabó.
FOTO DE: R. N. CATALUÑA.
FUENTE - WEB DE SUPERDEPORTE.ES