David Villa reflexiona sobre las ofertas del Real Madrid y el Barcelona, y también sobre su futuro en el Valencia en una entrevista que te ofrecemos en la edición de papel. No te la pierdas.
PAU FUSTER - La buena noticia es que Mestalla volvió a vibrar el sábado con el Guaje Villa, con sus goles... Atrás quedan todos los sinsabores de un verano en el que estuvo muy cerca de marcharse, todas las cosas que se dijeron y que incluso se pusieron en boca de Villa y que él nunca dijo ni siquiera llegó a pensar. En esta entrevista exclusiva para los lectores de SUperdeporte intenta aclarar todas las dudas que puedan quedar todavía, pero por encima de todo empieza a mirar hacia un futuro que para él está ligado por muchos años a Valencia y al Valencia CF. Así lo ha querido siempre y así es a pesar de que el Valencia CF un día se planteó la necesidad de traspasarlo para subsistir debido a su delicada situación económica.
Pregunta - ¿Se esperaba que la primera entrevista con SUPER esta temporada fuese como futbolista del Valencia?
Respuesta —Sí, siempre he dicho que me he sentido jugador del Valencia, todos sabéis lo que ha pasado este verano que han hecho que se haya complicado todo eso, pero desde siempre y en todo momento me he sentido futbolista del Valencia, como dije el último día antes de irme concentrado con la selección. Y así he pasado todo el verano.
—Desconozco si sus amigos gozaban de información privilegiada, pero si hay quien los aprovecha para comprar y vender terrenos, si hubieran apostado por su continuidad se habrían hecho de oro. ¿Ellos sabían sus pasos?
—Mis amigos no tenían información privilegiada, ellos sólo querían mi bien y no creo que hubieran intentado apostar en una cosa que era tan importante para mí.
—Me aseguran que ha empezado a entrenarse con una ilusión tremenda, ¿ha limpiado de su mente todo lo sucedido durante el verano?
—Como siempre, amo esta profesión y disfruto mucho de ella cada día, por lo tanto siempre tengo la misma ilusión. Después, desde hace un tiempo he limpiado mi mente, estoy tranquilo, ilusionado, con ganas de encontrarme mejor de lo que me encuentro y con ganas de que empiece lo bueno.
—¿Y qué ha sido más difícil de borrar de la mente?
—Quizás fue cuando el club me notificó que lo mejor para todos era que abandonara el Valencia. Para mucha gente puede ser un motivo de alegría, pero para mí, con todo el cariño que he tenido aquí y con las ganas que he tenido de defender esta camiseta, fue un momento duro, pero gracias a Dios luego todo cambió y para mí todo eso está olvidado.
—Mientras estaba en Sudáfrica se aseguró que llegó a llorar, ¿es eso cierto?
—Sí es verdad que lo pasé mal. Pasaron muchas cosas y yo tenía que atenderlas, y al fin y al cabo tenía que andar todo el día pegado al teléfono, avisando a mi familia de todo lo que iba pasando. Lo pasé mal porque allí tenía que estar a todo lo que conlleva la selección, pero cuando no entrenaba tenía que estar pendiente de otras cosas que creo que no me pasaron factura, porque lo borraba cuando me tocaba entrenar y jugar. Si hubiera tenido otra personalidad me habría pasado factura y hubiera dejado pasar una gran oportunidad como es disputar una Copa Confederaciones. No me pasó y estoy orgulloso de la personalidad que tengo, pero a cualquier otro jugador le habría pasado factura.
—Y lo peor de lo peor sería entonces cuando desde aquí se le hizo saber que se había llegado a un punto de encuentro con el Real Madrid por 42 millones de euros, que después se rompió por el traspaso de Negredo. ¿Hasta que no se firma un contrato no se puede dar nada por cerrado?
—No, y de hecho, el club nunca me notificó que se había llegado a algún acuerdo y sí que estaba negociando con varios clubes, pero nunca nada acordado, por eso nunca me he sentido jugador de otro equipo que no fuera el Valencia porque nadie me dijo ni que hubiera un principio de acuerdo. No sé lo que se le notificó a la prensa, pero a mí nada.
—Suele afirmarse que el futbolista siempre juega donde quiere, ¿en su caso ha sido así?
—Bueno, hay muchos factores, hay casos y casos, siempre basándose desde el respeto del club hacia el jugador y a la inversa. Siempre hay que estar en consenso, está claro que el que decide la vida del futbolista es el propio jugador, pero si tienes un contrato firmado con un club que siempre te ha tratado bien, debes tenerle un respeto. En mi caso, si el club decidió en su momento que yo saliera por el bien del club lo acaté, y cuando cambiaron las circunstancias también. Hay otros casos, como jugadores con los que no se cuenta, que a lo mejor quieren jugar y no se le permite.
—¿Entiende que un club quiera asegurarse el futuro de sus futbolistas realizando contratos largos? El VCF entendía que si un jugador quiere decidir su futuro debe firmar su contrato año tras año...
—No tengo nada que recriminarle a nadie. Está claro que hay situaciones como la mía, en la que llegan otros clubes y que no quieran venderte, otras en las que el club quiere vender a un futbolista y éste quiere seguir. Debe haber una relación de respeto entre club y jugador, para mí siempre ha sido así.
—¿Participaría en la ampliación de capital de una empresa que se desprendiese de sus principales figuras?
—Es difícil y es una de las cosas que me plantearon en la reunión de Madrid. Inicialmente lo principal era sacar una buena cifra económica con mi salida para subsistir y lo acaté, después el club pensó otras alternativas para obtener ingresos, como es la ampliación de capital, y ésta partía desde el punto que jugadores como Silva, Mata o mi caso permaneciéramos en el equipo. Son decisiones del club y nosotros trabajadores, ellos son los que deben decidir.
—¿El VCF le ofreció firmar un papel en el que se garantizaría su salida el próximo verano?
—No, y creo que es una situación en el fútbol ilógica. No sabemos lo que va a pasar en una semana como para pensar en lo que va a ocurrir dentro de un año. El Valencia siempre me ha mostrado, salvo esa primera semana en la que me comunicó que lo mejor era que me fuera, que quería que siguiera aquí, que cumpliera el contrato y que estaban muy a gusto conmigo.
—Quienes le conocen hablan de un Villa muy educado, simpático, bromista… pero durante la Copa Confederaciones acababa de entrenar y se aislaba, bien con su iPod o con el teléfono móvil. ¿Por qué?
—Sobre todo porque no tenía la tranquilidad que me gustaría tener en un torneo tan importante fuera de lo que era el fútbol, fuera de los entrenamientos y los partidos. No estaba tranquilo, recibía llamadas de todo tipo, me decían una cosa y a los cinco minutos se cambiaba todo, tampoco estaba la familia para contarle esas cosas, porque intentas consensuarlo con la gente que quieres y en mi caso la tenía muy lejos. Y sobre todo, lo que más me molestó es que pasaba mucho tiempo en los ratos libres pensando en otras cosas y eso pudo perjudicarme, pero no fue así.
—¿Ha tenido la curiosidad de mirar su factura de móvil durante la Copa Confederaciones?
—Sí, claro.
—¿Se considera un adicto al móvil?
—No, porque encima odio hablar por teléfono. Sí que cuando estoy aburrido me gusta enviar mensajes a mis amigos, pero no me gusta nada mantener conversaciones telefónicas.
—¿Cómo le recibieron en su casa su mujer Patricia y la pequeña Zaida?
—Sobre todo con muchas ganas de verme, porque nunca habían estado tanto tiempo sin mí, ya que normalmente cuando he jugado una fase final con la selección han viajado, tanto en Alemania como en Austria. Pero en este caso no han podido viajar a Sudáfrica y fue un mes sin verlas, nunca había estado tanto tiempo lejos de ellas.
—En Inglaterra existe una norma no escrita por la cual cuando un futbolista solicita por escrito el transfer request (solicitud de traspaso), el club está mínimamente obligado a negociar. ¿Lo habría pedido Villa?
—Nunca me lo había planteado, es más, me enteré de que existía por la salida de Xabi Alonso al Madrid.
—Pusieron en su boca estas declaraciones: «Sólo quiero ir al Madrid» y «sólo quiero ir al Barça». ¿Qué debe decirme de ello?
—Tengo la conciencia muy tranquila, nunca he hecho declaraciones públicas ni privadas con un periodista durante todo ese tiempo. Y por lo tanto, la gente puede interpretar lo que quiera, si es verdad, si es mentira, que si lo decía por bajo o por arriba, la única verdad es la que yo digo y es que no he hablado con ningún periodista durante todo este tiempo y por lo tanto no puedo ir convenciendo a cada persona de lo que yo pienso.
—¿Hicieron esos clubes todo lo posible por ficharle?
—Tampoco lo sé a ciencia cierta, porque al fin y al cabo las negociaciones se hicieron con el Valencia. Sí que a tiempo pasado, el presidente Manuel Llorente y la gente del club me van contando cosas que han ido pasando, pero al final, en esos momentos no estaba muy pendiente de todo eso. De hecho, el club creía que lo mejor era venderme y la única condición que puse es que yo quería quedarme en la liga, porque deportivamente no contemplaba este año marcharme a una liga extranjera. A partir de ahí, ellos lo negociaron todo.
—¿Es Villa mejor o peor que Ibrahimovic y Benzema?
—No lo sé, eso se demostrará en el campo cuando vayan pasando las jornadas.
—Hay una corriente de opinión que dice que Florentino Pérez no lo tenía claro y por eso no apostó fuerte por su fichaje, ¿cree que es cuestión de marketing?
—No lo sé, habría que preguntárselo a él, yo soy jugador de fútbol y nada más.
—¿Hubiera tenido poco sentido que el VCF le hubiese vendido al Barça y no al Madrid por la misma cantidad económica?
—Tampoco lo sé, es una decisión del club, ellos decidieron no hacerlo y no hay que darle más vueltas.
—¿Celebrará con más rabia si cabe los goles contra esos equipos?
—No, igual, todos los goles que he marcado siempre los he celebrado con mucha rabia, tanto en el Valencia como en la selección. Ojalá pueda marcarles muchos.
—Real Madrid y Barcelona lo querían fichar, el VCF necesita dinero por su situación económica y usted acaba en la ciudad del Túria. ¿Ha sido culpa de su representante?
—Creo que nadie se tiene que sentir culpable, se ha dado mucho bombo a todo. Hay mil casos durante el verano de interés por jugadores que vienen al club y éste decide si se venden o no, nada más, no creo que haya más historia en este caso. El Valencia supo rectificar, cuando llegaron las ofertas no las aceptó y nada más. Hay que valorar también el esfuerzo que ha hecho el VCF por retenerme, porque las ofertas que han llegado no han sido ni por uno o dos millones de euros, sino por mucho dinero, y decidieron no vender.
—Antes de que finalizara la temporada, cuando el club le hizo saber que necesitaba venderle, Emery conversó habitualmente con Negredo, su posible sustituto. ¿Echó de menos en esos momentos más cariño del técnico o del club?
—No, porque en aquel momento... aunque sí que soy consciente de que él quería que hablásemos y con la situación que había, prefería que finalizara la Copa Confederaciones para hacerlo, porque yo quería evadirme de todo lo demás. Para nada, soy consciente de que él siempre ha querido que yo me quedara, no porque sea más guapo o más feo, sino porque mi rendimiento aquí siempre ha sido óptimo, siempre he dado la cara por el club y es normal que la gente que está aquí quiera que me quede.
—En el fútbol se cuentan muchas mentiras, a veces a los periodistas no les llega la información directa por los intereses que existen en cerrar o no una operación, ¿cuántas mentiras dijo Villa en la rueda de prensa que realizó en Ermelo?
—Pues ninguna, la gente puede opinar, pero no he hablado ni en privado ni en público con nadie. Para que alguien me diga mentiroso lo único que queda es que lea mi mente, y si la ha leído podrá pensar si he mentido o no.
—En Old Trafford jugó con el brazalete de capitán, ¿cómo se sintió aunque no fuese la primera vez?
—Contento, para mí es un orgullo ser uno de los capitanes porque el Valencia es un club de muchísimo peso y llevar el brazalete o estar dentro del grupo de capitanes, es un peso grande para el futbolista. Me gusta tener esas responsabilidades que hacen que seas aún más competitivo y rindas mejor. El hecho de tener nuevas metas y nuevas responsabilidades es bueno para mí. El capitán es Marchena, luego está Vicente y como no había ninguno de los dos en el campo, lo llevé yo con mucho orgullo.
—¿Esta plantilla es más competitiva que la del ejercicio pasado?
—Sí que hemos cubierto posiciones en las que estábamos un poquito cojos, sobre todo en el lateral derecho, porque el año pasado con la lesión de Curro Torres nos pasamos mucho tiempo con un sólo lateral y este año partimos con dos muy buenos, con proyección y ganas. También, en este caso, la pasada temporada tuvimos problemas de lesiones con Marchena y Alexis y este año están óptimos, ha regresado Navarro, se ha fichado a Dealbert... No sé si seremos mejor equipo o peor, porque eso se demostrará en el campo, pero sí más competitivo y con muchas opciones de estar más arriba.
—De las caras nuevas, ¿le ha sorprendido alguien?
—No, porque soy un hombre de fútbol y los conocía. Fuera del campo me ha gustado que todos, incluso Mathieu que tiene ahora la barrera del idioma, están acoplados al vestuario y eso es importante, que haya un buen ambiente, para que en unas semanas no se distinga a los nuevos del resto.
—¿Pueden ser el equipo sorpresa de la liga?
—Pese a que llevamos unos años sin entrar en la Champions, el Valencia no puede ser un equipo sorpresa, porque es un club grande y aspira a estar entre los mejores. Si estamos arriba será el deber cumplido, nunca una sorpresa.
—¿Están el Real Madrid y el Barça en otra liga?
—Económicamente no se puede competir con ellos, ahí están las cifras, pero deportivamente sí, porque al campo entraremos once contra once. Pese a que ellos han tenido más facilidades económicas que nosotros, y que el Sevilla, Villarreal o Atlético, podemos estar ahí y su superioridad la deberán demostrar dentro del campo.
—¿Ha hablado ya con Albiol?
—No he podido hablar con él, pero lo haré porque lo aprecio. Sí lo he hecho con Iker, le pregunté por el ´Xori´ y me dijo que estaba acoplado y muy a gusto. Que sea feliz es importante para nosotros, porque aparte de ser un buen jugador sabemos que es una gran persona.
—¿Acabar la liga entre los cuatro primeros es una obligación?
—Si el equipo se hubiera clasificado para la Champions nada de lo que ha pasado en el verano habría pasado, no sólo en el plano deportivo sino también en el económico. Es un salto importante para la economía y es importante estar entre los cuatro primeros, debemos plantearnos que tenemos tres competiciones por delante en las que tenemos que ir paso a paso tratar de llegar hasta el final, pero acabar entre los cuatro primeros permite a este club dar un salto cualitativo.
—Otro gran futbolista es Mata, con quién se han mantenido conversaciones para renovar su contrato pero de momento no hay acuerdo.
—Pienso que Mata no es un caso típico, porque todos sabemos que si la economía del club fuese la adecuada o la mejor no habría ningún problema. Ha demostrado sobre el campo su valía y sinceramente debería estar en el top de los jugadores de la plantilla. Es un caso atípico pero se tratará el tema con respeto, porque Mata se lo ha ganado todo en el campo y se merece eso y mucho más. Creo que el club lo sabrá reconocer porque al chaval nadie le ha regalado nada y el club sabrá hacer frente a una renovación tan importante como es la de un jugador de 21 años tan experto.
—¿Qué sabe Villa de Inversiones Dalport?
—Nada, de momento es lo que nos hemos planteado todos los futbolistas. Nosotros pertenecemos al Valencia sea cual sea el presidente y esté quién esté debemos respetarlo al máximo, manteniéndonos al margen, entrenar y jugar, pero estar con el Valencia.
—¿No ha tenido la curiosidad de entrar en el buscador ´Google´ para buscar información?
—No, la verdad es que he estado tranquilito este verano en ese aspecto.
FUENTE - WEB DE SUPERDEPORTE.ES
FOTO DE VILLA - WEB OFICIAL DEL VALENCIA CF