El castellonense regresa hoy a la ciudad que le vio crecer, Cádiz.
ANDRÉS GARCÍA - El castellonense vuelve hoy a la ciudad que le vio nacer como futbolista profesional, Cádiz. Hace tres años Pablito era un niño introvertido que llegaba al Carranza en busca de una oportunidad que le abriera las puertas del Valencia. Ahora, Don Pablo regresa convertido en internacional absoluto y en uno de los nuevos ídolos de Mestalla con otra misión: competir sanamente con Joaquín por ser el interior derecho titular del VCF en el primer partido de Liga. Quiere sentirse más importante que el año pasado y mantener e incluso mejorar el nivel con el que acabó la pasada campaña. Por eso, apunta a la Champions y al Mundial. Tiene al valencianismo en el bolsillo y sólo le falta acabar de convencer a Emery. El Carranza sabe que le va a volver a ayudar.
Pablo ha vuelto igual de enchufado que se fue el año pasado...
—He vuelto con muchas ganas. La verdad es que me ayudó mucho acabar bien la pasada temporada después de vivir momentos difíciles. Acabé muy bien la Liga, tuve el premio de la selección española y todo eso me ha hecho venir con muchas ganas y con la ilusión de empezar, como mínimo, igual que el año pasado. Ahora me toca esperar a entrar en el equipo desde el inicio y poder dar el nivel al menos con el que acabé.
—Debutó en Manchester, arrancó contra el Arsenal y en Alzira ya se empezó a ver su mejor versión.
—Sí, es importante empezar bien las pretemporadas con buenas sensaciones y yo poco a poco las voy teniendo. Al principio siempre es normal que cueste coger el punto y la forma porque hay que rodarse, pero todos vamos a ir a más.
—Físicamente es de los mejores.
—Tengo la suerte de que aunque esté de vacaciones y pare de jugar y de entrenar, me pongo enseguida en forma y es una ventaja.
—¿Dónde apunta Pablo esta temporada a nivel individual?
—Yo lo único que quiero es jugar todo lo posible, espero que me vaya mejor que al principio de la pasada temporada. Quiero dar el mismo nivel como mínimo que en los últimos meses. Quiero hacer cosas grandes con el Valencia y esperemos que este año nos clasifiquemos para Champions y por qué no luchar por un título. Y luego, claro, está la ilusión de volver a la selección y más habiendo Mundial.
—¿Y encontrar la regularidad que tanto le costó el año pasado?
—Siempre la necesitas y la quieres para dar tu mejor nivel, pero está claro que es complicado porque hay mucha competencia y porque todo el mundo quiere jugar. Yo sé que si estoy al nivel de la temporada pasada, e incluso mejorándolo, jugaré porque creo que puedo dar mucho más de mí.
—La competencia en el interior derecho es brutal. Joaquín estaba fino y Pablo va y rompe el último partido con una jugada personal.
—Sí pero es bueno, es lo que todo entrenador quiere y lo que cada equipo busca. Hay una gran competencia, pero es una competencia sana. Todos sabemos que va a ser muy difícil jugar en este equipo y que tenemos que dar el cien por cien para ganarnos al sitio. Le estamos poniendo las cosas difíciles a Unai en ese aspecto porque va a tener que elegir entre un futbolista y otro para algunas posiciones.
—¿Pablo o Joaquín? ¿Parte algunos de los dos con ventaja?
—Yo creo que todos partimos de cero. Hay jugadores como Villa y Silva que son indiscutibles en este equipo, pero todos partimos de cero y será el entrenador el que tenga que decidir a quien pone.
—¿Se siente más titular que el año pasado o, por lo menos, con más peso dentro del equipo?
—Sí, puede ser. Creo que la selección me ha ayudado a eso. Mi ilusión siempre fue volver al Valencia para ser importante y es lo que quiero. Quiero sentirme más importante que el año pasado y eso llegaría jugando más partidos y más minutos que es lo que quiero y por lo que ya he empezado a pelear desde el primer día.
—¿Cuál es la actitud de Emery con Pablo este año? ¿Qué le ha dicho?
—Bueno, me felicitó por la selección, me dijo que estuviera tranquilo y que no perdiera la confianza del año pasado porque iba a tener mis oportunidades.
—A quien ya se ha ganado completamente es a la afición. La suya fue una de las grandes ovaciones de la noche de la presentación.
—Sí, la verdad es que sí, estoy muy agradecido a la afición por el apoyo que me ha dado. Lo noto en la calle, en Paterna. La gente me da muchos ánimos y está conmigo y yo estoy muy agradecido. A mí me podrán salir bien o mal las cosas, pero siempre doy el cien por cien en el campo y yo creo que eso le llega a la gente.
—No sólo el interior derecho tiene competencia. ¿Tan buena pinta tuvo la nueva plantilla del Valencia?
—Sí, en muchas posiciones hay competencia y de la buena. Creo que tenemos este año una grandísima plantilla. Se pueden hacer dos once titulares de garantía y eso es lo que queremos, que el equipo esté arriba siempre. Esa competencia en muchas posiciones va en beneficio del equipo siempre.
—¿Qué le ha sorprendido de los nuevos fichajes de este verano?
—La verdad es que me han sorprendido. No son fichajes no tan nombrados como los del Madrid o el Barcelona que son a golpe de talonario, pero se ha fichado muy bien porque han venido gente con mucha hambre, con mucha ilusión, con futuro y que, encima, son muy buenos jugadores. Moyà ya se ha visto que es un gran portero, Bruno, Mathieu, Dealbert fíjate el rendimiento que está dando... y luego gente que ha vuelto como Banega o Navarro. ¡Se pueden hacer grandes cosas!
—Me dicen que no se le da mal hablar el francés con Mathieu...
—Bueno, bueno... En el instituto estudié cuatro años francés y casi que me entiendo mejor con él en francés que en inglés sí. Hay que ayudarle entre todos. Va a ser importante para nosotros.
—Los Míchel, Jordi Alba, Miku y compañía vienen muy fuertes... ¿Le gusta que puedan tener cabida gente joven como usted?
—Ultimamente en el fútbol se está contando más con gente joven. Se está viendo en el Valencia con casos como el de Míchel. Jordi Alba está muy bien.. Es gente que viene de atrás con ganas de asentarse, que da la talla y que es muy importante para el equipo.
—Vuelve a Cádiz. ¿Qué significa Cádiz para Pablo Hernández?
—Mucho. Tengo muchas ganas de volver a jugar en el Carranza aunque sea con otra camiseta. Pasé muy buenos momentos a nivel personal y deportivo. Allí di mi salto como profesional, estaba jugando en el Mestalla, fui a buscar allí mi oportunidad y todo me salió de maravilla. Tengo muy buenos recuerdos. Es una afición, es un club y es una ciudad a la que le tengo mucha ilusión y siempre la voy a llevar en mi corazón.
—Además, jugando ante el Sevilla...
—Fíjate. Lo tiene todo. Será un partido bonito y muy disputado como todos los Valencia-Sevilla. Habrá mucho ambiente y esperemos poder ganar. No se parece a un amistoso porque tiene muchos alicientes... Ojalá ganemos , me haría mucha ilusión ganar y jugar la final y ganar el Trofeo porque es uno de los trofeos más importantes del verano en todo el mundo.
—¿Firma la final contra el Cádiz?
—¡Por supuesto! Sería muy bonito. Por mis ex compañeros, toda la afición del Cádiz, por los empleados del club. Sería un sueño. Me crié allí y espero el Carranza sea talismán otra vez para mí.
—Le tira mucho el Cádiz todavía, ¿eh? ¿Es su segundo equipo?
—Sí, es uno de mis equipos. Sólo fueron seis meses, pero fueron muy intensos y no los voy a olvidar nunca. Mi primer equipo es el Valencia donde he pasado toda mi vida, también el Castellón donde me crié y, como no el Cádiz sin olvidar al Getafe. Ojalá entremos en la Champions y el Cádiz y el Castellón suban a Primera. Eso para mí sería lo mejor.
—¿Ha cambiado mucho aquel Pablo del Cádiz al de ahora?
—En el campo sí, he cogido más experiencia, estoy más asentado en el campo. Pero, en lo personal creo que no he cambiado mucho. Creo que nada, lo sabe la gente que me conoce. Me gusta ir con mis amigos, hacer las mismas cosas que he hecho siempre, juntarme con mi familia, no sé.. Soy el mismo.
Fue capitán del Valencia por primera vez
Está orgulloso por su brazalete Pablo lució el pasado martes en Alzira por primera vez en su carrera el brazalete de capitán del VCF. «Fue anecdótico. Del año pasado sólo estábamos yo y Albelda. David por las circunstancias que todos sabemos prefiere no llevarlo y, bueno, me tocó a mí. Para mí es un orgullo y ojalá vuelva a lucirlo dentro de unos años, sería una buena señal».
Vio a la selección española por la televisión
Asume pero no olvida el Mundial
El castellonense se cayó de la última lista de Del Bosque. Lo asume, pero no pierde la esperanza de volver y soñar con el Mundial. «Sabía que era difícil, porque la lista iba a ser más corta. Sé que no tengo que bajar los brazos y debo trabajar con la misma ilusión para volver a vivir una experiencia como esa. Si hago bien las cosas tendré posibilidades».
No estará sólo en el Ramón de Carranza
Sus padres y amigos están allí
La familia Hernández ha querido estar presente en esta cita tan especial para Pablo. Sus padres viajaron ayer a Cádiz y el valencianista se reencontrará en el hotel de concentración de Jerez con sus viejos amigos gaditanos. Nadie se lo quiere perder. Sus familiares que se quedan en Valencia ya están listos para grabar los dos partidos.
FUENTE - WEB DE SUPERDEPORTE.ES